Imagínate que existe un espacio donde te reciben con una elegante copa de fino cristal.

En el que con solo caminar unos pasos te encuentras con un pabellón inmenso inundado de botellas de vino de las casas locales e importadoras más importantes del país.

A tu lado, pasan cientos de personas con provocativas bandejas de quesos y exquisitos curados que te invitan a tomar asiento, relajarte con la buena música del lugar y disfrutar de una buena copa.

Es Expovinos, la feria de vinos más importante del país que este año se realizará desde hoy 18 de junio hasta el sábado 21 de junio en Corferias.

Para mí es un gran plan, pues además de ser un espacio divertido y diferente para pasarla bien, te ofrece la posibilidad de aprender y descubrir marcas y sabores que tal vez no conocías.

Si eres un gran conocedor sin duda lo vas a disfrutar mucho, si por el contrario, eres como yo que aunque no eres un experto aprecias el sabor del vino y quieres aprender un poco más (y de paso llevarte unas cuentas botellas a un precio especial), estos básicos consejos sobre maridaje te servirán para identificar qué tipos de vinos van bien con determinadas comidas y así puedas ir preparado para vivir esta feria con otro sentido.

Creo que seguramente has oído hablar de aquella regla que habla de que el vino tinto acompaña bien las carnes rojas y el vino blanco las blancas. Si así es, déjame contarte que esta condición ya pasó a la historia.

A través del arte del “maridaje” o de la “armonía” como ahora lo llaman, se pueden encontrar combinaciones y contrastes que aumentan el deleite entre el vino y la comida, que no te imaginarías.

Sólo para que te hagas una idea, estas son algunas claves sobre los efectos que un vino puede producir sobre algunas comidas:

Los vinos ácidos como los blancos, rosados y algunos tintos, pueden compensar una comida grasa o hacer que una comida parezca más salada.

Por otro lado si este tipo de vinos se acompaña con comidas dulces, sentirás una sensación de acidez menor.

Un vino tinto con un grado de alcohol alto puede hacer que una comida ligera no sepa a nada, de ahí que se recomiende para acompañar comidas de sabor intenso como carnes, estofados y proteínas.

Un vino dulce va muy bien con comidas dulces, chocolates y postres pues reforzará el sabor del vino y de la comida.

También puede ir bien con comidas ligeramente saladas.

Un vino tánico, es decir, astringente y de sabor fuerte pero seco en la boca como algunos vinos tintos, son excelentes para comidas con contenido de grasa o proteínas.

Otro aspecto importante a tener en cuenta es la capacidad que tiene la comida para exagerar alguna característica del vino.

Por ejemplo, los frutos secos cuando se acompañan con un vino tánico como el que mencionamos arriba, puede hacer que el vino se sienta aún más astringente o una carne por el contrario, puede neutralizar esta astringencia.

También puede pasar que el vino anule el sabor de algunas preparaciones.

Si una carne está cocinada con un vino muy fuerte le restará potencia al vino que lo acompañe.

De igual manera puede resaltar los sabores. Si por ejemplo acompañas un postre preparado con frutos rojos con un vino con notas frutales, el sabor será aún mayor y muy placentero.

Por último, antes de elegir un vino para acompañar una comida lo mejor es tener en cuenta los ingredientes y el sabor que predominará para que puedas hacer una buena elección y no sobra recordar que el mejor vino es el que a ti te gusta y el peor, es el que no te gusta.

Si te entusiasma conocer más sobre este fascinante universo, ya sabes que hay un plan que te espera.

Las entradas las consigues en Corferias pero si estás en Bogotá, puedes conseguir pases dobles (hay unidades limitadas), sin ningún costo por realizar compras en www.carulla.com 

Recuerda que además todos los viernes son de celebración en ese mismo portal: www.carulla.com  , eso significa que podrás encontrar encontrar una gran variedad de vinos y con descuentos buenísimos.

Espero que te hayan servido estos consejos básicos y verte por allá para que choquemos nuestras copas. ¡Salud!